"Lavando sin parar!" Debido a la inocencia de Tarzán, que había vivido solo durante tanto tiempo, Jane le dió clases de sexualidad un día, explicándoselo todo como un niño pequeño para que así lo entendiera:
- Mira Tarzán, eso que tienes ahí colgando entre tus piernas es tu trapito y esto que tengo yo aquí entre mis piernas es una lavadora...
lo que tu debes hacer es lavar tu trapito en la lavadora....
Tarzán sin perder tiempo alguno, siguió al pie de la letra el consejo de su amada Jane Tenía "el trapito" mas limpio que nunca! Cada día que pasaba se sentía mas feliz!
No dejaba de usar la "lavadora" de Jane siempre que recordaba lo bien que se
sentía luego de haberlo lavado!
Las siguientes cinco noches Tarzán estuvo lavando su trapito sin parar y cuando Jane logró respirar finalmente dijo:
- Escucha Tarzán, los lavados de trapito no pueden ser tantos ni tan seguidos, porque se te puede gastar; deberás esperar dos o tres días para lavar tu trapito....
Al oir eso Tarzán se quedó decepcionado y después de estar un mes sin poner la lavadora Jane le dijo a Tarzán:
- Tarzán, ¿qué te pasa? ¿Porqué llevas un mes sin poner tu trapito en mi lavadora?